En 2050 las economías emergentes tendrán el poder económico del mundo
La economía mundial podría duplicar su tamaño para el año 2042;
Para el 2050, seis de las siete mayores economías del mundo podrían ser países emergentes;
La participación de la UE en el PIB mundial podría caer por debajo del 10% para el año 2050;
China ya ha superado a los Estados Unidos como la mayor economía en función del PIB y podría ser la de mayor valor a tipos de cambio de mercado antes de 2030;
India podría superar a los Estados Unidos para 2050 y quedar en el segundo lugar e Indonesia podría avanzar al cuarto lugar, lo que relegaría a economías avanzadas como las de Japón y Alemania.
Hacia el 2050, el poderío económico estará en manos de los países emergentes, desplazando de esta forma a economías avanzadas. Esta es una de las conclusiones clave del último informe World in 2050 de PwC, The long view: how will the global economic order change by 2050? (La visión a largo plazo: ¿cómo cambiará el orden económico mundial para 2050?). En el mismo se presentan proyecciones del crecimiento potencial del PIB hasta 2050 para 32 de las mayores economías del mundo, que en conjunto representan alrededor del 85% del PIB global. Estas proyecciones se basan en la actualización más reciente de un modelo detallado de crecimiento global a largo plazo que PwC desarrolló por primera vez en 2006.
El informe pronostica que la economía mundial podría duplicar su tamaño para 2042, si crece a una tasa anual promedio real de aproximadamente 2,5% entre 2016 y 2050. Este fenómeno estará impulsado en gran medida por los mercados emergentes y los países en desarrollo, con el crecimiento de las economías del E7 (Brasil, China, India, Indonesia, México, Rusia y Turquía) a una tasa anual promedio de alrededor de 3,5% en los próximos 34 años, en comparación con solo un 1,6% para las naciones avanzadas del G7 (Canadá, Francia, Alemania, Italia, Japón, el Reino Unido y los Estados Unidos).
Tabla 1: Rankings proyectados del PIB global en términos de PPA (paridades de poder adquisitivo) (en miles de millones de US$, a valores constantes de 2016)
Cuando se considera el PIB medido a tipos de cambio de mercado (MER), no se observa un cambio tan radical en el poderío económico mundial. Aun así, China emerge como la mayor economía del mundo antes de 2030 e India es claramente la tercera hacia 2050.
Pero, sin duda, el foco principal estará en los mercados emergentes más nuevos, que van adquiriendo una posición destacada. Para 2050, se proyecta que Indonesia y México serán mayores que Japón, Alemania, el Reino Unido o Francia, mientras que Turquía podría superar a Italia. En términos de crecimiento, Vietnam, India y Bangladesh podrían ser las economías que crezcan a mayor velocidad durante el período hasta 2050, con un crecimiento promedio del 5% anual como se ilustra en el Gráfico 1, que también muestra la apertura del crecimiento entre población y PIB per cápita.
Gráfico 1: Crecimiento promedio del PIB real proyectado por año, 2016-50
Nigeria tiene potencial para ascender ocho lugares en el ranking del PIB, hasta la posición 14 para 2050, pero solo podrá concretar sus posibilidades si diversifica su economía más allá del petróleo y fortalece sus instituciones e infraestructura.
Colombia y Polonia también muestran gran potencial, y se proyectan como las economías de crecimiento más rápido en sus respectivas regiones, América Latina y la UE.
En el caso de Argentina, si bien se espera que hacia 2050 descienda algunas posiciones en términos del valor de su PBI, hasta ubicarse en el puesto 29, continuará siendo la tercera economía más grande de Latinoamérica, detrás de Brasil y México y en el ranking global apenas por debajo de naciones desarrolladas como España y Australia (26 y 28 respectivamente).
Ingresos promedio
Una buena noticia para las economías avanzadas de hoy es que continuarán registrando los ingresos promedio más altos; con la posible excepción de Italia, todos los países del G7 seguirán ubicados por arriba del E7 en los rankings de PIB per cápita en 2050. Se proyecta que los mercados emergentes cerrarán gradualmente la brecha de ingresos con el tiempo, pero la convergencia plena de los niveles de ingreso a escala mundial probablemente llegará mucho después de 2050.
China alcanza un promedio de ingresos de nivel medio para 2050 (ver Mapa 1), mientras que la India permanece en la mitad inferior de la escala de ingresos debido a su nivel inicial, a pesar del crecimiento relativamente alto proyectado en el período. Esto es un ejemplo de que, si bien el fuerte aumento de la población puede ser un impulsor clave para el crecimiento del PIB total, eliminar las diferencias en los niveles de ingreso promedio demandará mucho más tiempo.
Mapa 1: PIB real per cápita proyectado en 2050
Se proyecta que el crecimiento global disminuirá a medida que las poblaciones vayan envejeciendo y los países emergentes se conviertan en economías maduras
El informe proyecta que el crecimiento económico mundial registrará un promedio de aproximadamente 3,5% por año durante el período hasta 2020, disminuyendo a unos 2,7% en la década de 2020, 2,5% en la de 2030, y 2,4% en la de 2040. Eso tendrá lugar a medida que muchas economías avanzadas (y eventualmente, también algunos mercados emergentes como China) experimenten un marcado descenso de su población en edad activa. Al mismo tiempo, las tasas de crecimiento de los mercados emergentes serán más moderadas a medida que lleguen a ser economías maduras y disminuya su espacio para crecer con rapidez a la par de otras. Estos efectos, según se proyecta, serán más fuertes que el impacto de las economías emergentes que tienen un peso progresivamente mayor en el PIB mundial, que de otro modo tendería a fomentar el crecimiento global promedio.
Desafíos para que los hacedores de política alcancen un crecimiento sostenible a largo plazo
Para materializar su gran potencial, las economías emergentes deben emprender una inversión sostenida y efectiva en educación, infraestructura y tecnología. La caída en los precios del petróleo entre mediados de 2014 y principios de 2016 puso de relieve la importancia de que las economías emergentes estén más diversificadas para un crecimiento sostenible a largo plazo. A toda esta situación subyace la necesidad de desarrollar instituciones políticas, económicas, legales y sociales dentro de las economías emergentes para generar incentivos a la innovación y el espíritu empresarial, creando economías estables y seguras para realizar negocios.
Grandes oportunidades para las empresas con la adecuada combinación estratégica de flexibilidad y paciencia
La evolución de los mercados emergentes generará muchas oportunidades para los negocios, que surgirán a medida que estas economías avancen hacia nuevas industrias, interactúen en los mercados del mundo y cuando sus poblaciones, relativamente jóvenes, tengan más riqueza. Se convertirán en lugares más tentadores para vivir y hacer negocios, atrayendo inversiones y talentos.
No obstante, las economías emergentes evolucionan con rapidez y a menudo son relativamente volátiles, por lo que las empresas necesitarán estrategias operativas que combinen flexibilidad y paciencia de manera adecuada para tener éxito en esos mercados. Los estudios de casos incluidos en el informe de PwC ilustran cómo las empresas deberían estar preparadas para adaptar su marca y su posición en el mercado para ajustarse a preferencias locales que difieren y suelen tener más matices. Será fundamental un entendimiento profundo del mercado local y sus consumidores, lo cual a menudo implicará trabajar junto a socios locales.
Se proyecta que el crecimiento global disminuirá a medida que las poblaciones vayan envejeciendo y los países emergentes se conviertan en economías maduras.
En 2050 las economías emergentes tendrán el poder económico del mundo