El ex presidente de Estados Unidos, Donald Trump, pidió a sus partidarios y sus donantes que se esfuercen por lograr la destitución del primer ministro israelí, Benyamin Netanyahu.

Personas cercanas a Trump dijeron que el ex presidente estima que Netanyahu debe ser destituido para castigar su inacción ante el aviso de la inteligencia de Egipto sobre la inminencia de una gran operación del Hamas.

Donald Trump también pidió a sus partidarios que inciten Israel a ser razonable y a dar muestras de moderación.

En Israel, el primer ministro Netanyahu y su ministro de Defensa, Yoav Gallant, anunciaron que se preparan para «aplastar» a los «animales» del Hamas e instaron la población de Gaza, 1,1 millones de personas, a huir de ese territorio, a pesar de que ya se haya bajo un bloqueo total del ejército israelí.

El ex presidente Trump estaba considerado como un amigo personal de Netanyahu y como el presidente estadounidense más favorable a Israel, pero sus detractores afirman que ahora trata de vengarse del primer ministro israelí, quien le dio la espalda durante la elección presidencial estadounidense de 2020.

Con los Acuerdos de Abraham, Donald Trump trató de resolver el conflicto entre israelíes y palestinos recurriendo al interés de ambas partes por los negocios, siguiendo el esquema utilizado antes por el 7º presidente de Estados Unidos, Andrew Jackson, para poner fin al genocidio de los llamados “pieles rojas”, los pobladores originarios de los territorios que hoy conforman los Estados Unidos de América.